El bautizo de Saúl fue un día especial para sus familiares, amigos y por supuesto, para él (aunque quizá aun no lo sepa). Las fotografías de bautizo son, casi seguro, las primeras imágenes profesionales que se van a tomar del pequeño y por eso mismo, hay una responsabilidad añadida en que salgan bien. Además, los bautizos tienen algo especial y es que las emociones están a flor de piel y eso, hay que captarlo.

Tanto bautizos, comuniones como bodas son momentos únicos que los protagonistas quieren que salgan perfectos y el fotógrafo tiene que crear confianza para que tan solo “se preocupen” de pasarlo bien. Para elegir un buen fotógrafo, nosotros te recomendamos que veas su trabajo para ver la calidad y si te gusta su estilo, que hables con él para saber qué impresión te da y si puedes, pide referencia a antiguos clientes para que te cuenten su experiencia. Al fin y al cabo, un cliente contento es el mejor ejemplo.

En nuestro caso, para estos eventos nosotros ofrecemos una caja de recuerdos únicos donde se guardan las fotografías en un álbum de fotos y un pendrive para revivir esos momentos tanto en imágenes físicas como digitales. En este caso, quisimos personalizar la cajita de Saúl con su nombre y un detalle de una cigüeña (las que traen los niños).
No dudes en elegir a un fotógrafo de confianza. Las fotografías son recuerdos que queremos mantener por mucho tiempo. Por eso mismo, hay que cuidar cada detalle.

Si quieres unos recuerdos únicos opta por un regalo especial.